jueves, 20 de marzo de 2008

Los paradigmas de producción y su impacto en el mercado laboral

En la productividad, es clara la posición que debe asumir el dueño de los medios, para que su empresa sea eficazmente rentable, es decir, como lo que se busca en estos negocios es maximizar la producción a un costo mínimo, se hace necesario el cambio en las políticas para producir y llevar a efecto las mejoras necesarias, esto conlleva adoptar sistemas novedosos que no requieran mano de obra excesiva, puntos especializados en la producción y costos mínimos, estos fines traen consigo la desmejora para los trabajadores. La historia tiene numerosos ejemplos de cómo los cambios radicales en la producción tienen efectos sobre el mundo laboral, la revolución industrial, el caso más notorio e importante, que trajo mejoras sustanciales para el sector, pero a su vez perjudico la vida laboral, claro, con sus posteriores correcciones al sistema, que se hacían imprescindibles para una relación mas justa trabajador-patrono.

La sindicalización, derechos laborales, protección social, etc., representan que, “los cambios traen consigo mejoras en general”, lo que contrasta, es quien o cuantos pueden beneficiarse; Efectos de la Revolución Industrial tanto en el trabajo, como los efectos del modelo de la producción en serie (conocido como el modelo taylor-fordista) partiendo de los principios fundamentales en que se apoyó éste, como sistema de organización del trabajo y sus consecuencias negativas para los trabajadores. También entran los efectos del modelo de la producción flexible, este modelo en palabras de Calero “… es la adecuación rápida de la organización ante la variabilidad de la demanda, lo que se traduce en posibles cambios del personal laboral, los efectos de la flexibilidad laboral son también conocidos, que en opiniones encontradas “se da lugar a cambios tan profundos que para algunos se está en presencia de una nueva ruptura industrial”, para otros autores destacados Frente a estos y muchos otros cuestionamientos, algunos han llegado a afirmar que estamos en presencia del fin del trabajo con consecuencias negativas para la conformación de identidades colectivas y de relaciones sociales.
Para el caso venezolano es indiscutible que la transformación de la producción tiene efectos colaterales de duras repercusiones en la vida laboral, pero esto se enfrenta al hecho de que en nuestra industria que no representa la mayor parte del sector productivo, no se ha conseguido una automatización tan desarrollada en otros países en términos de la producción flexible, más aun así se han dado transformaciones a ese nivel laboral, puesto que nuestro sistema muestra avances en materia de legislación del trabajo, sindicalización, protección, entre otros. Resalta también el caso en particular de Venezuela, que muestra un sector productivo muy disociado, es decir, sectorizado en donde converge el estado, el sector privado tanto formal como el informal, profesional y no profesional, dependiente y no dependiente, en donde casi todos están afectados. Además, más allá de lo que dicen las regulaciones en materia laboral, el mercado de trabajo es tan pequeño que obliga al desempleado a aceptar condiciones laborales del trabajo flexible más precario

No hay comentarios: